Obra ampliamente elogiada que le valió el Booker Prize 1989. La novela narra en primera persona los recuerdos de un mayordomo inglés que evoca su carrera en tono algo presuntuoso y reprimido, consciente de sus deberes, y pone de manifiesto cuánto le ha costado su vida de servicio; la conclusión, por su reticencia, resulta angustiosa en tanto que manifiesta una vida que ya no puede recuperase. Resulta admirable el sutil manejo de una narrativa y unos personajes intrínsecamente ingleses, apoyados en investigaciones rigurosas de los detalles históricos.