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Huir no siempre es lo más bello que tenemos, pero a veces es la única salida para conservar o mejorar la vida. Sea en el bosque o dentro de la misma ciudad, por fuerzas políticas tiránicas o por hechos personales que nos angustian, el alma que huye sufre. A pesar de que es un sufrimiento lleno de esperanza, siempre queda la duda de si uno llegará al lugar que ha elegido para empezar de nuevo, el final siempre es incierto. Aquí os dejamos una pequeña selección de personajes que han huido con todas sus fuerzas, son el claro ejemplo de que la vida es un camino no muy largo que a veces nos pide tener la maleta preparada.