Les nostres recomanacions i propostes

Ante el inminente hecho de hacernos mayores, de llegar al final de nuestros días, Geoff Dyer nos propone este estudio sobre tan inevitable tema. Y lo hace con agudeza e ingenio, fusionando sus experiencias personales con el estudio y la observación del final de las vidas de grandes personajes. El libro, con una estructura fina y eruditamente desordenada, desgrana diferentes experiencias sobre el ocaso de la vida creativa sin dejar de lado una buena dosis de humor.

Nos presenta a un pesimista Cioran convencido de que cuando más se avanza en la vida menos cosas quedan en las que convertirse; a un Giorgio De Chirico condenado a falsificar sus propias obras exitosas de juventud; a un viejo y liberado Turner al final de su carrera pictórica, donde todo se desdibuja y toma ligereza; o a un enfermo Nietzsche, al borde de la euforia a causa de su agonía psíquica. Defensor del humor como analgésico contra el tiempo en vez de la solemnidad, Dyer estará más del lado de un desgraciado Larkin que del imponente Camus. Propenso a llorar de emoción, Dyer nos confiesa que con la edad «las capas aislantes hacia el mundo se debilitan» y nos habla con la misma intensidad de la recta final de Dylan, de Beethoven o del retirado Roger Federer. Paradójicamente, afirma, nos encanta la idea de lo último, la última obra, la última batalla, el último partido, para recordarlo y repetirlo, como un sinfín de bises tras abrirse el telón, para eternizarlo.

Tomando la palabra del autor, a falta de grandes proyectos, bienvenidos sean los innumerables trucos y el sinfín de pequeños planes ante el paso del tiempo.
Esquivemos el fracaso y sigamos orgullosos hacia la dulce derrota.